Como muchos saben, estoy yendo a un taller literario con la profesora Verónica Sukaczer, que recomiendo a todos los que quieran aprender a escribir. Ya he escrito unos cuantos cuentos cortos, que tengo que corregir todavía. Este último fue aprobado así que lo comparto con ustedes. “Las tres hermanas” está basado en una historia real de mi familia, durante la Segunda Guerra Mundial. Espero que les guste:
Las tres hermanas
– En la guerra los mejores regalos son comestibles. No importan los colgantes de oro, ni la ropa, no hay nada mejor que una lata de aceite cuando hay hambre. A tu mamá su novio le regaló un bife, como si fuese una alianza, y tu abuela le dio la mitad al perro, que consideraba parte de la familia. Ella nunca se lo perdonó.
– Es cierto, tía Caro, mamá me contó esa historia varias veces.
– En el campo la pasaron mejor porque tenían alimentos ¡En Marsella nos comíamos los gatos!
– ¿Los gatos? ¡Pobrecitos!
_ ¿ Pobrecitos nosotros o los gatos?
– Los gatos – dije sin pensar. Luego me corregí – Y ustedes, por supuesto.
Mi tía Caro era la menor de las tres hermanas. Mamá fue la que más sufrió durante la guerra. Se sentía responsable por todo. Nunca abandonó su papel de hermana mayor. Hélène, la del medio, sufrió en silencio. No quería hablar del tema. Caro, en cambio, se dejaba cuidar por todos y sus recuerdos eran menos trágicos. Siempre juntas, parecían tres muñecas, las tres de la misma estatura (no crecimos por causa del hambre, decían en coro).
– Nunca me voy a olvidar cuando papá nos trajo una lata de leche condensada para cada una ¡Era la fiesta del mercado negro! Y si, que querés que te diga, con el mercado negro, apareció la comida.
– ¿Es verdad que comieron gatos, tía Caro? – le volví a preguntar, perpleja.
– Si, y también ratones.
Me lo decía con una sonrisa, mientras se arreglaba el flequillo. Sus dos perritos dormían a su lado. No podía imaginarla con un ratón en la boca.
– Nicole no abrió la lata. La guardó.
_ Claro, así es mamá, precavida en todo.
_ La guardó para controlar el mundo que se caía a su alrededor.
_ ¿Y la tía Hélène?
– Ella siempre en el medio, se tomó la mitad y la otra mitad la guardó para después.
– ¿Y vos?
_ Imaginate, yo me la tomé toda de una vez.
– Tan parecidas pero tan distintas – pensé
– Poco tiempo después hubo un bombardeo. El resto ya lo sabés. La bomba cayó en casa y nosotras nos salvamos milagrosamente. Las latas de leche condensada de Nicole y Hélène volaron por los aires, con el resto de nuestras pertenencias. Tu abuela nos buscaba en medio de los escombros. No se veía nada, el polvo no nos dejaba respirar. Todo era angustia y sufrimiento pero con la única diferencia de que yo tenía el estómago lleno y satisfecho.
– Y mamá tenía el estómago vacío – dije.
– Resultado: de nada sirve controlar la vida – me dijo mientras acariciaba a su perro.
La mucama trajo té y medialunas en una bandeja. También había un yogur ligth
– Es que estoy haciendo régimen – me dijo, sin antes guiñarme el ojo.
Precioso cuento
Hola Chispa, guapa!!! Qué linda sorpresa! Gracias por tu comentario. Como va el pucho? Besos grandes!
Me ha encantado el cuento Oli. Sigo sin fumar, tengo una hijita preciosa que se llama Olivia!!!
😄 ❤
Exelente olivia te felicito.
Bueno Olivia, parece que ya estamos calentando los motores, me esta gustando.
Voy a tener que ir reservando una butaca para la presentación del Libro!!!, jaja
Excelente!!! que continue en el próximo capítulo…
Buen día chicos! Gracias por los comentarios! Ahora se comenta mucho en el facebook pero el blog se alimenta de comentarios. A pesar de los altos que tuve en estos seis años conseguimos que este sitio sobreviva! Muchos lectores invisibles nos agradecen y yo les agradezco a ustedes.
Besos enormes y que tengan un buen día!!!!
lamentablemente no se si esta bien o mal escrito. ESO NO LO SE.
lo que si se, es que me entretuvo, me intereso, sobre todo porque es un episodio de la mama de OLIVIA, a quien admiro mucho como pintora, ahora escritora y sobre todo porque ES UNA BELLA PERSONA.! GRACIAS OLIVIA POR COMPARTIR CON NOSOTROS ESTE, TU PRIMER CUENTO. y como bien dice RODOLFO, habrá que ir reservando butaca para la presentacion de tu primer libro.! MUCHOS EXITOS ! y por favor, rápido el siguiente!!!!!!! y además………. QUE HISTORIA.!!!!!!!
Querida Oli, mientras te leía hacías que imaginara las escenas conforme las relatabas, será porque tu cuento está basado en una historia real o será porque tal y como escribes tú lo haces posible.
También sigo esperando tu libro, sabes que desde hace mucho tiempo siempre te he animado a hacerlo, así que seguiré cerca de tí para disfrutarlo.
Ahora tu blog cuenta con otra nueva sección. Realmente eres «ÚNICA». Besitos amiga TKM
Muy bueno Olivia! Me encanto tu cuento!
Hola chispa!!! Te felicito por tu hijita preciosa! Que lindo nombre, jajajajajaja. Todo eso sin fumar. Muchas noticias buenas. Me alegro un montón! Besos ❤
Madrinaaaa,la verdad que siempre me has alentado. Muchas gracias por tu comentario y nunca te vayas que un día vamos a festejar juntas el libro 🙂 me encantó el video, jajajajajajaja. Como haces para encontrar siempre vídeos perfectos para la ocasión? Tu si que eres ÚNICA, Jajajaja. Besos, guapa! TKM
Gracias Silvia! Besos, amiga. TKM
Doris querida, gracias por tu comentario! Me alegro que te haya gustado el cuento. Me encanta como me apoyan con lo del libro. Mira si lo hacemos realidad! Lo veo muy lejano pero en la vida nada es imposible, menos teniendo amigos como ustedes cerca. Besos grandes, sos una mujer maravillosa
El tema es que uno sabe que no es cuento, sino historia verídica… Son los dolores de recuerdos heredados imposibles de borrar. Que fea es la guerra !!!
Me alegro que realizaras el taller… Yo conocí a Verónica en Miramar, y me vendría bien aprender con ella….